Ocho órdenes de prisión y 14 órdenes de allanamiento e incautación - este es el resultado del operativo "Detonando", que comenzó a revelar detalles sobre el asesinato del periodista Décio Sá, ocurrido el 23 de abril de 2012 en São Luis, capital del estado de Maranhão, en el noreste de Brasil. Sá era periodista del diario O Estado do Maranhão y escribía un blog de denuncias.

En una conferencia de prensa celebrada el 13 de junio, fecha del inicio del operativo, el secretario de Seguridad Pública, Aluisio Mendes, dijo que las investigaciones efectuadas por la policía identificaron a una especie de "consorcio" formado por empresarios, sus asesores, y un policía, como autores del crimen. Una persona está prófuga.

Según la policía, el empresario Gláucio Alencar Pontes Carvalho y su padre, José de Alencar Miranda Carvalho, están acusados de ordenar el asesinato del periodista. Los asesores Fábio Aurélio do Lago e Silva y Airton Martins Monroe fueron identificados como los responsables de la contratación del sicario Jonathan Sousa Silva. El arma utilizada, según la policía, pertenece a Fábio Aurélio Saraiva Silva, subcomandante de la Policía Militar.

Comentarios en el blog del periodista asesinado podrían ayudar a esclarecer las causas del crimen. El nombre del empresario fue citado en un artículo publicado en una revista de circulación nacional. El artículo denunciaba la corrupción en la distribución de las comidas escolares en Maranhão y otras actividades ilegales. Sá habría reproducido esta nota en su blog, que sigue activo gracias a sus amigos e incluye detalles sobre el crimen y los asesinos (http://www.blogdodecio.com.br/).

Las investigaciones se habían mantenido en reserva hasta el estallido del operativo "Detonando". La policía ofreció una recompensa de unos 50 mil dólares a cambio de pistas sobre los asesinos. A finales de mayo se publicó un retrato hablado del sospechoso que había disparado contra Sá. Uno de los acusados, Valdênio José da Silva, que había sido detenido poco después del asesinato del periodista y puesto en libertad por falta de pruebas, fue asesinado de cinco balazos el 11 de junio de 2012. La policía investiga si este crimen está relacionado con el asesinato de Sá.