No es una fecha especialmente determinada, sino la coincidencia de que hoy se cumple otro aniversario de cuatro asesinatos de periodistas en distintos países de la región, sin que se registre mayor información sobre los respectivos procesos judiciales y castigo a los autores.

En Colombia, un 20 de mayo de 1991, fueron asesinados el periodista radial Carlos Julio Rodríguez, de la emisora La Voz de la Selva, filial de radio Caracol, y el político y también periodista José Libardo Méndez. Sicarios que se desplazaban en motocicleta les dispararon al cruzar un barrio al sur de Florencia, Caquetá. También resultó herida en esa oportunidad la esposa de Méndez y locutora de la misma estación, Judith Aristizábal.

En un día como hoy en Tocantins, Brasil, en 1996, fue muerto a balazos el reportero Raildo Barros, de radio Araguaya FM.

Y en México, el país que registra en el hemisferio la más alta cifra de crímenes contra periodistas, fue asesinado en 1997 Abel Bueno León, director del semanario Siete Días. Se le encontró muerto de un disparo en la cabeza y con la espalda rota, cerca de una autopista en el estado de Guerrero. El profesional había sido acusado junto a otros seis colegas, de difamación por un ex Secretario de Estado mejicano, a quien la prensa vinculaba con el asesinato, por parte de la policía, de un abogado.

La SIP mantiene en el continente un programa interactivo contra la impunidad en crímenes de periodistas. En los últimos 23 años han sido asesinados o están desaparecidos 387 profesionales de la prensa.

El público puede visitar www.impunidad.com para más información y apoyar ahí la iniciativa.